El 7 de septiembre finalizando ya todos las vacaciones de verano, porque el cachorrín de nuestra hija comienza el cole al día siguiente, nos hacemos una ruta preciosa, que nos encanta y nos permite conectar juntos con la naturaleza, ¡cómo lo pasamos!, un día bien rebonito.
Llegados a la mano de la Senda del Celorio vimos a este precioso lagarto expuesto al sol, seguro que le gusta tanto como a nosotros, bendito solecito.
Momentos en el camino y vistas a todo nuestro mágico territorio.
Recogiendo flores para poner en casita.
Y después subimos por este mágico sendero de la ruta del Trasgo entre zarzamoras llenas de ricas y maduras moras, ¡cómo nos pusimos!, las botas jajajaja.
Y esta foto a ras de suelo, donde al contemplar el cielo estrellado de Paradilla se entienden tantas cosas, "Ya tú sabes" y sino conocéis la ruta ni la historia del Celorio, os animo a que la hagáis, es oro molido.
Disfrutamos mucho, muchísimo de esta jornada, fuimos muy felices juntos, cómo siempre que compartimos estas aventuras y nuestras escapadas. Conectados a nuestra tierra, a nuestra naturaleza amada.
Y por supuesto bajamos a ver al Trasgo...y vaya que si lo vimos y hablamos con él y le encomendamos una tarea bien bonita.
Para terminar nuestra jornada montañera comiendo en el Mesón de Miguel, en Pola de Gordón, y este día comimos bien rico.
Pactamos formar TRIBU, nuestro amor será siempre REFUGIO, nos sostendremos en esta vida y en muchas más.
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