Maravilla de descanso vacacional de Semana Santa, los días 29, 30, 31,1, 2 y 3 de abril volvimos a Teruel, Manuel y yo ya nos habíamos enamorado de Teruel hace 10 años y volver con nuestra hija y su cachorrín ha sido un acierto total, aquí viven sus amados Dinosaurios, él, que se los conoce todos y disfrutó como niño que es de todo este entorno único alrededor de los dinosaurios, los demás también disfrutamos muchísimo viéndole disfrutar a él, y ahora más que nunca, viéndoles juntos.
Ha sido un viaje muy bonito y que nos ha devuelto estos días un poquito de calma y serenidad ante tanta barbaridad.
Dinopolis, disfrutando a tope, menos en una atracción que no daba la altura aún nuestro pequeñín, las probó todas, un día entero aquí viviendo jajaja, lo que más le gustó El viaje subterráneo por el agua. Tripitimos esta atracción.
Visitamos Rubielos de Mora, qué pueblo precioso de Teruel...aprovechando que también hay dinosaurios jejeje.
Nos encantó.
Cómo no, estamos al ladito mismo de Albarracín así que volvimos a Albarracín que queríamos que lo conociesen Judith e Illán, les gustó muchísisimo y disfrutamos una mañana enterita hasta bien entrada la tarde.
¡¡Qué risas pasamos por esas callejuelas empedradas con tanta historia!!. Esta mami y este hijo son mundiales.
Besito a Oto en este lugar mágico de dinosaurios en Albarracín.
Nos alojamos en Teruel, en pleno Centro Histórico, en la Plaza del Torico...y la primera mañana nada más aparecer en la plaza los paparachis a por Judith jajajajaja, ¡qué me mondo!, allí mismo la hicieron una entrevista sobre las vacaciones de Semana Santa en Teruel...y en la maleta llevaba un poco de todo para por si acaso. Salieron Judith e Illán en todos los telediarios de Aragón jajaja.
Empezamos televisivos las vacaciones.
Qué decir de Teruel, ciudad preciosa donde las haya y llena de historia y rincones espectaculares. Nos encanta Teruel...y al igual que León, también existe, existimos ambas ciudades.
Cómo nos identificamos con éste "también existe"
Disfrutamos mucho también en el Spa...qué gustito, Ata y Oto al de mayores y Judith e Illán al de peques, que está lleno de dinosaurios ¡¡cómo no podía ser de otra forma!!
"Encarando la realidad, disfrutando de lo bueno, sintiéndonos capaces de aguantar el golpe de lo malo sin rompernos y responsabilizándonos del cambio". Buenaventura Del Charco Olea.
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