EL FAEDO, ROBLEDALES DE LA ROBLA, HAYEDO DE ORZONAGA

El día 2 de noviembre es festivo y aprovechamos para ir al Faedo de mi pueblín querido y precioso, Ciñera de Gordón, con nuestra hija y nuestro nietín...¡¡cómo disfrutó nuestro pequeñín de la aventura del bosque, de los duendes, de Haeda, de los árboles y las hojas!!...

...en definitiva de la naturaleza. 

Una maravilla total ...¡¡qué bien lo pasamos en su compañía!!.

Y al siguiente domingo día 15 de noviembre nos adentramos en los robledales de La Robla y Brugos de Fenar...fijaos de que estamos rodeados...y aquí sin salir de casa...caminar un poquito y adentrarnos en esta pasada de bosques de cuento, de verdadero cuento.

El día está con niebla alta y bastante húmedo y eso hace que nuestros bosques estén aún más bonitos si cabe...¡¡cómo huele todo a bosque!!, de los mejores aromas que existen.

Y no sólo los olores son maravillosos...los colores son mágicos. Color otoño, mi color favorito...todos en uno.

Aún nos da tiempo para acercarnos a dar un pequeño paseo a otro bosque, al de Orzonaga...

¡¡cuánto necesitamos el bosque!!...

...la verdad es que los datos en La Robla (en general en España) son alarmantes...hay una incidencia de contagios de Covid altísima y aquí, en la naturaleza, es donde más agustito estoy y donde más segura me siento ahora.

Encontramos el bosque de Orzonaga también muy, muy bonito...otro rato maravilloso que pasamos dentro de esta joya leonesa...no hay prisa, recogeremos nuestra rica comida en Restaurante Olimpia para llevárnosla  a casita...así da gusto.

Este día no sabía aún que todo estaba empezando...que mi hija, mi Manuel y mi yerno pasarían La Covid...aún no saben ni cómo ni cuando pudieron estar en contacto con este virus, el caso es que lo cogieron y gracias a  mi Dios lo pasaron sin apenas problemas.

Desde este domingo 15 de noviembre  hasta el 13 de diciembre no pudimos salir a nuestra naturaleza amada...

aislamiento, cuarentena, PCR, angustía, bajonazos psicológicos, preocupación, obsesión por cómo avanzarían los síntomas...libramos nuestro chiquitín y yo...espero y deseo que este bicho se aleje de todos nosotros y podamos vivir un poquito tranquilos, aunque sólo sea un poquito...

Mi cuñada estuvo muy malita y también mi cuñado, y un compañero...y he visto vecinos morirse...todavía no entiendo como tantos imbéciles niegan todo esto....de verdad...¡¡no lo entiendo!!

¡¡BENDITA NATURALEZA!!

"El bosque nos regala alegría día a día, nos regala salud, nos da VIDA"