21 de septiembre de 2017

RIBEIRA SACRA, MONASTERIOS, SIL

Y cómo véis ,el día 28 de Agosto, después de la fuerte tormenta, amaneció así de bonito, entre nieblas, pero solecito y calor...nos vamos al Monasterio de Santa Cristina ,cómo podéis observar la carretera que nos lleva hasta esta joya del románico (como a casi todos los lados en La Ribeira Sacra) es mágica, entre bosques y estrechita.

Antes hacemos una preciosa parada en el Camping de Parada de Sil, donde se encuentra este Mirador privado sobre el Sil, está muy bonito y merece la pena detenerse en este precioso lugar."La mirada mágica".



Y un poquito más adelante del Camping de Parada de Sil,entramos en el misterioso paraje del Monasterio De Santa Cristina...¡¡qué maravilla!!



Este lugar inspira un montón de sentimientos y emociones...está enclavado en un bosque de cuento y el Monasterio en sí, es bien bonito.


Disfrutamos a tope.
El abrazo a este viejo y sabio castaño, aquí los castaños son árboles llenos de vida y otorgadores de ella.
Da penita salir de este lugar, da muy buenas sensaciones, pero hay que ir al Miradoiro de La Columna (os lo mostraré en la entrada de Los Miradores) y a navegar por el bello Sil en catamarán.

Un maravilloso viaje en barco por el Sil, un río lleno de detalles, vida y desde el que podemos contemplar esos cultivos de uvas en bancales, muchas veces verticales totalmente, y en terrenos abruptos y salvajes...nos encantó...los viñedos son los protagonistas de La Ribeira Sacra.


Las piedras nos sorprenden con sus tantas y tantas formas extrañas y características, los hindús con sus turbantes, los obispos en sus tronos etc, etc...
También hemos visto al milano negro en su hermoso vuelo.

Y después de gozar por las aguas del Sil, comidita gallega, muy rica con vino de La Ribeira Sacra.
Por la tarde Monasterio de Santo Estevo, que actualmente es Parador Nacional...también impresionante.





Y agotados, pero felices y aún con energía para seguir ruta...nos adentramos en otro paraje de ensueño, qué bosques...qué entorno...aquí se encuentra el Monasterio de San Pedro de Rocas...
¡¡PRECIOSO!!.




Y a este medieval campanario subió Manuel, yo ni loca...la verdad es que con algo de ganas, si quedé.


El lugar es sobrecogedor ,con sus tumbas antropomorfas y sus capillas excavadas en la roca desde el siglo VI...y a la vez te llena de calma y paz, sólo se escucha el silencio en todo su escenario natural...naturaleza en estado puro mezclada con Patrimonio  cultural.


"Cuando las oportunidades no llamen a tu puerta, construye una"

2 comentarios:

Ramon dijo...

Sensacional reportaje, sobre un paraje sensacional.Un placer ver como disfrutáis de la naturaleza y de la vida.

Teresa dijo...

Maravilloso Sara. Besos.