CUMPLEAÑOS DE JUDITH , NIEVE Y MONTAÑA DE LEÓN.

El 19 de enero hacemos una de las rutas que más nos gusta, subida a Fontañán, esta vez desde la pista de la arenera de Olleros, es preciosa. El 18 fue el cumpleaños de Judith pero como trabajaba decidimos celebrarlo el domingo con nuestros queridos amigos que han estado unos días aquí desde Madrid, después de nuestra ruta y de que Judith salga de trabajar.

El año que nació nuestra hija había una buena nevada y estos días también la anuncian, pero creíamos que el tiempo se había equivocado, empezamos la ruta hasta con sol...la terminamos nevando, en la comida nevaba con fuerza y a la noche todo se cubrió con el manto blanco.

Lo vemos a lo lejos, está todo precioso, el robledal marrón puro y el camino mágico, subir Fontañán por sus cinco alternativas es colosal, por esta parte es por donde menos lo hemos subido, si bajado, pero no subido y me gusta taaanto.

Roqueamos y sendereamos de lo lindo, este contacto con nuestra naturaleza amada es sanador total, qué agradecida por tanto que me das pachamama.

Se está nublando mucho y la temperatura baja de golpe, al final los del tiempo se equivocan raramente, comenzamos a notar los primeros copos de nieve.

Al llegar a Cármenes para comer y celebrar el cumple de Judith nos encontramos que hubo cacería y toda esta jabalitada, allí los regalaban, menuda jornada tuvieron los cazadores, algunos eran tremendos. 

Qué pena no poder coger uno y hacer unas patatas con jabalí con lo riquísismas que están.

Y aquí estos tres guerreros, nuestra Judith, la cumpleañera, con Javi y Diego, la sorpresa que se llevó Judith al entrar y que sonara el cumpleaños feliz...y por supuesto después de comer rico, rico y contundente viendo nevar , después...a soplar las velas.

Y foto de grupo bajo la nieve, Javi no quiere volver a Madrid, se quiere quedar  y no hay quien nos saque de aquí, ¡venga, habrá que irse!, que el viaje a Madrid no es corto y como se ponga a nevar será complicado.

De regreso ya pillamos Las Hoces de Vegacervera totalmente blancas, la carretera totalmente cubierta.

Qué rico comimos, y brindamos por nosotros...volveremos la próxima vez que volváis, amigos.

La nieve no nos impidió ir a Ciñera para esta vez celebrar el cumple con la familia, con abuelos, tíos y primo...los padres estuvimos en casi todas las veces que Judith celebró este año sus 38 jajajaja. Porque todavía quedaría una, la más especial, con su cachorrín, con nuestro nietín amado y del alma, que sería el fin de semana siguiente, cuando Illán vuelva con mami, hay días que su ausencia es asfixiante.

Volvemos no muy tarde para La Robla, no vaya a ser que se ponga peor, a nevar a todo nevar, y se nos complique... porque aunque pasan las quita nieves muy de seguido nos encontramos todo el camino la carretera completamente blanca, pero despacito y con  neumáticos de invierno todos llegamos sanos y salvos a casa.

Así, un año más , el 18 de enero ( en este caso el día 19) la nieve lo cubre todo...la noche es blanca, muy blanca y reina un silencio invernal totalmente mágico.

Acabamos la preciosa jornada con nuestro CONROBLA bajo la nieve.

"Para apreciar la belleza de los copos de nieve, es necesario estar en medio del frío."