Aquel viaje a Llanes nos hizo ser muy felices y venir recargados de energía. El 24 de marzo nos acercamos a la vecina Cantabria, ya que cada vez que vamos a Llanes, rara es la vez que no aprovechamos para hacer alguna ruta pendiente, conocer lugares nuevos o visitar los que ya conocemos.
Esta vez nos acercamos a la Playa de Sonabia, en Liendo, qué lugar más precioso, desde aquí comenzamos la ruta que hay a los ojos del diablo...qué rutaza, 6km con 500 metros de desnivel, muy, muy intensa, qué vértigo, mala idea empezarla desde aquí ya que después me dijeron que desde un punto en la A-8 entre Oriñón y Liendo es muy bonita y mucho más fácil...para mi ha sido horrible esta ruta, muchísimo vértigo, en plena caída constante hacia los acantilados, horrible...volveré a Oriñón para hacerla desde el punto más sencillo.
La playa de Sonabia es una auténtica pasada y el pueblo precioso, algunos dicen de esta ruta DIVINA que realmente se llama Los Arcos de Llanegro porque son dos ventanas enormes al mar Cantábrico, que es un capricho de la naturaleza, es un rincón de ensueño en el que se pueden ver buitres leonados y alimoches sobrevolando punta ballena, en la playa de Sonabia.
Un paisaje kárstico de encinas y cabras montesas. Por eso este rincón tiene poco que ver con el infierno y mucho con el cielo, con un lugar mágico y sobrecogedor.
Aún aquí llevo buena cara, pero ya me estoy temiendo una subida complicada, y tanto...qué vértigo, qué mal.
Hacemos zoom para avistar la subida, y realmente desde la playa parece coser y cantar pero a medida que ascendemos por el senderito estrecho vemos la inclinación y las caídas al mar, puffff, impresiona, es de las que engaña y mucho.
Aquel día y ya abajo hacia Punta Ballena, los rayos del sol jugaban intensamente con los ojos del diablo.
Vistas de la subida y vistas desde arriba...el sitio desde luego es espectacular, impresionantemente bonito.
Por este camino que se ve aquí que es la vertiente del otro lugar de inicio de ruta, por la A-8 hubiese sido mejor opción para mi, pero volveré sin duda para hacerla desde aquí y así poder disfrutarla.
Las trepadas...horribles, sobre todo si te das más impulso del debido vas rodando a saber donde, a mi desde luego me pareció muy peligrosa, y lo más destacado es que van niños, yo me quedé impactada, ¿se nota verdad?
Abajo es otra cosa, el acceso a la playa de Sonabia es precioso, caminito estrecho y bosque.
Paseando por Punta Sonabia y Punta Lanzadoiro, Mirador Punta Pilota el mar estaba espectacular.
Un vistazo al interior y otro vistazo al Cantábrico embravecido. Cantabria eres preciosa.
Este día comimos en el Camping de Oriñón, muy rico y al solecito, que de invierno posterior nos íbamos a hartar.
Y a la vuelta hacia Llanes nos detendríamos en otro paraje de cuento y que tenía muchas ganas de conocer. Ermita de Santa Justa, metida en el mar mismo...eso os lo cuento otro día.
"Hay lugares donde una se queda y lugares que se quedan en una".
3 comentarios:
El estar tan cerca las montañas del mar Cantábrico es lo que hace que tenga esos acantilados y bellas playas.
Aquí en Palencia tenemos el Pico del Infierno, que aunque secundario de Peña Prieta, es palentino y el Balcón de Judas en una ruta de senderismo desde Guardo.
Saludos.
Paisajes como esos, son los quenos permiten disfrutar de la Naturaleza.
Feliz fin de semana. Un abrazo
Que maravilla de paisajes, no me extraña que estéis tan felices.
Gran abrazo nuestro
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