Dicen que lo bueno se hace esperar...esta ruta la tenía planeada desde hace tres años...y este día por fin se podía hacer realidad...di mil gracias por haber podido disfrutar de este lugar...y vamos sumando. Cada día estoy más agustito en el monte.
Manuel va abriendo huella, la mitad de la ruta la hacemos con nieve y en algunos lugares es bien profunda su altura...¡a gozarla!
Lo primero que tenemos en la ruta, a tres km del comienzo, es un sueño...LOS FORFOGONES, que cascada...el lugar exhala magia y energía positiva a raudales.
Ratísimo que les costó sacarme de allí.
Foto de grupo en Los Forfogones
Y me abrazo a esos árboles mágicos, ¡no podía ser de otro modo!
P: ¿Y si me quedo aquí y a la vuelta os veo?
R: No Sara...que te perderás lo que falta
Uffff y... ¡vaya lo que faltaba!, esta ruta la he vivido de una forma personal muy a mi manera, otro lugar en el que quedó una parte de mi alma (menos mal que tengo un alma inmensaaa jajajajaja, que sino esta naturaleza me la roba todita)
En el camino el ciclo de la vida, los restos de un ciervo, y es que son muchos los que perdieron su vida en este fuerte temporal invernal que azotó a mi tierra este año.
Y entre bosque de acebos y hayas llegamos al Pozo de La Leña...ojalá pudieseis escuchar a través de las imágenes, la fuerza del agua...en la ruta se suceden muchos pozos, pero la fuerza que tenía el de La Leña era impresionante...aquí sentías la grandiosidad de la naturaleza de una forma colosal.
Y el fotógrafo es captado al ras del agua, Manuel quiere inmortalizar cada gota de agua...
Si no veis la imagen anterior, ésta metería miedo...pero muchas veces las cosas no son como parecen.
Y foto de grupo en el lugar, estamos anonadad@s
El entorno es perfecto, simplemente perfecto, de una belleza que sólo le pertenece a ella, a esta naturaleza que tanto nos regala.
La primavera está brotando desde las entrañas de la tierra, y viene para instalarse aquí, muy cerquita mio, y me va a regalar toda esa fuerza que necesito, para afrontar estos cambios que también se van instalando poquito a poquito en mi vida...otra etapa del ciclo de nuestra vida que hay que afrontar...esta madurez. :)
Y llegados a este otro pozo, decidimos parar aquí a comer nuestros ricos bocatas, en su ladera hay buen número de rebecos jugando y me lo paso bomba observándoles.
Momentos bocatadecisivo...ummmm...y que manjar es un bocata en la naturaleza, en medio de toda esta inmensidad.
Y a la hora de seguir el camino , un momentito de relax, un momentito conmigo misma, ensimismada en mis pensamientos, mis deseos, mis anhelos, mis sueños, mirando para ese agua limpia y clara...
he comprobado que cuando hago rutas en las que hay agua, a modo de cascadas, rios, arroyos o el mar...la purificación de mente, emociones y pensamientos es tremenda...
La naturaleza sana el alma, sana de verdad y sin contraindicaciones.
La segunda parte de la ruta la dejo para los próximos días, porque continuamos y continuamos andando por un valle salpicado de magia,vereis con todo lo que nos encontramos en los km restantes y en la vuelta.
Ya estamos preparando otra incursión en él.
"Mira con tu comprensión, encuentra lo que ya sabes y verás el camino para volar". Juan Salvador Gaviota
8 comentarios:
¡Qué fotos más bonitas! abrazada a la naturaleza, sintiendo el aire puro, la emoción en tus excursiones y compartiéndolas con nosotros, hasta el bocadillo jajaajaj me parece de lo más hermoso tu blog, gracias preciosa por tanto cuando nos haces disfrutar con tus fotografías.
Un beso enorme.
Ay Sara, ¡qué lugar más mágico! Espectacular la fuerza del agua y de la naturaleza en este lugar. Y ahora que despierta la primavera tiene que estar increíble.
Gracias por regalarnos estas imágenes.
Un abrazote.
Como siempre un paseo precioso. Un abrazo.
Con la intensidad, el entusiasmo y la fuerza con que impregnas la descripción de todo lo que has vivido y sentido en la Naturaleza, haces posible que me llegue un poquito de la sensación que experimentas por este "camino para volar", que tu ya has encontrado.
Todo un placer seguirte.
Un abrazo muy, muy fuerte para todos vosotros.
¡Qué lugar tan hermoso! y las fotos que compartes maravillosas y ustedes tan hermosos y valientes y esforzados, felicidades por andar en esos lugares.
Me gusto la torta que comen, así se llaman por acá.
Un abrazo Sara, con amor
Fantástica excursión. Tal como la relatas todavía parece más hermosa, si cabe. Enhorabuena. Un abrazo.
Siempre Sara, siempre lo bueno se hace esperar y viendo tus fotografías que puedo decir y ese bocata, os lo montáis de vicio. La naturaleza siempre nos da algo para descubrir y disfrutar. Un enorme abrazo amiga y precioso reportaje.
Pues me alegra que la espera haya merecido la pena, Sara, de eso se trata: de disfrutar el momento y admirar la bondad de lo natural que siempre nos humaniza.
Besos
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