Ruta de interés etnográfico.
Pudimos empaparnos de pequeños detalles, y de enormes castaños que ni los cuatro podíamos abarcar...qué gran lugar para disfrutar de nuestra amistad.
Desde el Albergue de Arrojo, por la
carretera de Toriezo y una vez pasado el pueblo de Vega seguimos por un
camino a la izquierda que con fuerte pendiente llega al de Villagondú.
Lo atravesamos y seguimos por camino empedrado hasta el pueblo de Fresnedo.
Continuamos por la carretera a Faedo y al poco tomamos un desvio descendente
que nos deja en los molinos.
Son
tres molinos escalonados donde aún se muele la escanda, cereal de
montaña parecido al trigo.
Se atraviesan bosques de castaños con sus
tradiconales corros para guardar su fruto.
Nos adentramos en un mundo de seres mágicos...estaba llenito de ellos.
El camino entre castaños, helechos, mantos de hojas...y hermosos laureles con su flor...otro descubrimiento esa flor del laurel.
Y muchos practicando parapente
Y el caminito no deja de sorprendernos, hasta el final regalándonos detalles.
Y despedida de un fin de semana inolvidable en el alto La Cobertoria...entre la ruta y este momento, por supuesto, comimos ese pote de castañas en la capital de Quirós en casa Jamallo...uimsss que pecado y que gozada para el paladar...para mi todo un descubrimiento...como cada minuto en esta tierra Quirosana, que me ganó el alma.
"Aunque
esperes encontrar la felicidad en la meta, no te olvides nunca de divertirte
durante el camino"
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1 comentario:
Sara, que bellezas de paisajes, me encantan todos por donde vas. Las flores creo que no son de laurel, creo que es otro árbol y es precioso. Besos.
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