26 de mayo de 2013

HÁBLAME DEL MAR



 Sólo cuando llego aquí, consigo esa serenidad que se apodera de mi y me hace tan feliz.
Hoy día 26 de mayo hemos hecho la penúltima etapa del Camino de San Salvador, nos tocó Pola de Lena- Olloniego, una jornada estupenda con el grupo. Agotada de tanto andar y de tanto comer, me pondré a preparar las muchas fotos capturadas del día...y mientras...
 sólo quiero escuchar el sonido del mar...habladme del mar...que desde mi ventana el mar no se ve.

11 comentarios:

L. Gispert dijo...

Buenos días, SARA.... Que bien lo has plasmado. A mi también me encanta estar junto al mar, escuchar su voz, su serenidad, y que me envuelva la luz.... Oye... Esta vez lo ha escrito tu Poeta???

Las fotos me gustan mucho, emocionan...

Besos.

El tejón dijo...

No entendería vivir sin la mar.
Saludos.

Oteaba Auer dijo...

Desde mi ventana el mar si se ve, querida Sara...Taxi a tu disposición para llegar ;)

Todo precioso, como siempre. Las dos pirmeras imágenes, ¡geniales!.

Un BesOTE y feliz semana!!!

Ramon dijo...

Este poema de Rafael Alberti habla del amor al mar, al que tantos i tantas estamos "enganchados"

"El mar. La mar.
El mar. ¡Sólo la mar!

¿Por qué me trajiste, padre,
a la ciudad?
¿Por qué me desenterraste
del mar?

En sueños la marejada
me tira del corazón;
se lo quisiera llevar.

Padre, ¿por qué me trajiste
acá?

Gimiendo por ver el mar,
un marinerito en tierra
iza al aire este lamento:
¡Ay mi blusa marinera;
siempre me la inflaba el viento
al divisar la escollera!"

Un abrazo.

Teresa dijo...

Precioso Sara. Cuanto me gustaría ver el mar desde mi ventana, pero solo veo una laguna, la cual también me gusta bastante. Un abrazo fuerte.

CARLOS dijo...

Meca, ahora recuerdo que llevo tiempo sin verlo... mañana subiere a lo alto (aquí cerca) y lo veré, lo veré. Preciosa entrada, una pena la coincidencia, me hubiera gustado veros de nuevo. Abrazos Sara.

Duarte dijo...

Qué serenidad!!!
Me has hecho recordar una etapa muy bella de mi vida cuando iba a pescar con mi padre a la playa de Angeiras... tiempos que no vuelven!
Un gran abrazo

montse dijo...

Unas preciosas imágenes para recordar las buenas sensaciones que has vivido estos dias...
Un abrazo muy fuerte!!

Ginebra dijo...

Todos los que vivimos en el interior estamos deseando pasar unos días junto al mar, es cierto. Es un paisaje inspirador y relajante.
Creo que este año me tendré que conformar con verlo en fotografía, jajajajajaja.
Bonitas fotos, Sara.
Besos

La Gata Coqueta dijo...



Esta mañana después de levantarme y cuando ya me disponía a salir a la calle, me acudió la indecisión, de no saber que ponerme...

Y de pronto el niño que aún llevamos dentro me sugirió que me vistiera de felicidad, ya que así cuando me encontrara con los amigos la podría compartir...

No sé si ha sido una idea afortunada o no, pero el hecho es que aquí estoy esperando que la aceptes a través del silencio de las palabras, que son el portavoz de mis sentimientos...


Quisiera que mañana al despertar el alba te pintará un paisaje lleno de caléndulas de mi parte para ti!!


Un beso bajo la alameda de los ruiseñores...


Atte.
María Del Carmen




María dijo...

Ojala se viera el mar desde mi ventana, ni por equivocación, jajaja peeeeero, me tendré que conformar con mirar la ventana de este cristal que me une a tu blog porque de esta manera sí he podido ver el mar... ¡y qué playa! ¡y qué placer contemplar el mar desde tu rincón!

Son preciosas las imágenes, Sara.

Gracias por acercarnos a tanta belleza.

Un beso enorme.