De escolares, aprendíamos los rios de memoria... casi cantando...El Tajo nace en la Sierra de Albarracín provincia de Teruel...y la canción volvió a aflorar... ahora "in situ".
Es increible que este regato tan pequeñito, después se convierta en uno de los rios más largos de España y que discurre también por nuestra vecina Portugal, ¡¡es increible!!...pero yo lo vi...vi su nacimiento en plena Sierra hermosa de Albarracín.
Y aprovechamos también para ver su paisaje de Simas, enormes agujeros en la tierra...que impresión da verlas...el sonido de la caida al vacio de las piedras que tiramos es...sobrecogedor.
Y después nos pegamos un homenaje en el paraje natural del Algarbe de la Sierra de Albarracín...que rico sabia todo... después de la mañana de desgaste de energía que llevamos...¡¡a reponer fuerzas!! que nos queda una tarde trepidante...
Ya de tarde...Nacimiento del Júcar estamos en la Serranía de Cuenca.
La garganta del infierno que nos lleva la nacimiento del Júcar es un paraje precioso, precioso donde los haya y también imponente...así como la fuente de San Blas, donde ya empieza a tomar forma el curso del rio Júcar.
La preciosa cascada del molino que forma El Júcar
Y para finalizar ...seguimos en La Serranía de Cuenca...el nacimiento del rio Cuervo que nos encontramos así...sumido en la mayor de las sequías...que pena, es desolador...sólo cae un hilito de agua apenas apreciable.Necesitamos que llueva y mucho.
Cae la tarde, salimos del hotel a las 10 de la mañana, llevamos todo el día recorriendo maravillas de la naturaleza, maravillas que se nos regalan cada día...el cielo está de unos tonos increibles...para disfrutar del momento en estas Sierras.
Y llegados a Albarracín...con muchas ganas de comer ricos manjares, nos decidimos por una rica sopa fria de melón con jamoncito... que está deliciosa, y de segundo, las maravillosas migas de Albarracín con huevo y uvas ...
Después...a descansar al hotel, que al día siguiente nos vamos a Teruel.
Las experiencias vividas,
dan paso a tu manera de ser.
Te abren las puertas, a la maduración
y a la evolución.
(Del libro "La energía del amor" de Margary Villar G
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